NUESTRO COMPORTAMIENTO NO VERBAL CUANDO ESTAMOS INCÓMODOS

Aunque no sea de forma exhaustiva, en esta entrada se intenta mostrar varias maneras de expresar, de forma no verbal, el malestar, la incomodidad y la aversión hacia una situación, estímulo, pregunta, etc.

En los siguientes vídeos, se darán gestos de rascarse, sacudirse, tocar algún objeto e, incluso, lanzar una patada imaginaria. Estas conductas tienen la función de desplazar el malestar y la incomodidad, generados por una interacción social molesta, hacia un acto más disimulado y aceptado socialmente. Los conocemos como gestos adaptadores, aunque desde la etología se conceptualizan como estrategias o conductas de desplazamiento. Dicho esto, hay que tener en cuenta que no todos los gestos adaptadores son consecuencia de incomodidad por una situación social determinada. Tal y como se explicó en la entrada AUTOADAPTADORES/AUTOCONTACTOS, dichos comportamientos también se asocian al procesamiento psicolingüístico de la información. Así,cuando no somos capaces de encontrar una palabra, por ejemplo, nos acariciaremos la barbilla, pellizcaremos el labio inferior o nos rascaremos la cabeza. Tras esta puntualización, asumiremos los gestos adaptadores a la incomodidad y al malestar.

De diferente naturaleza, las respuestas fisiológicas también pueden ser un indicador que la situación a la que estamos siendo expuestos nos resulta molesta o tensa. Tragar saliva y un aumento de la tasa de parpadeo van a ser respuestas, de naturaleza fisiológica, que se van a observar en algunos de los siguientes vídeos, como ejemplos de reacciones involuntarias y no controladas de incomodidad.

 Ante algo que nos es incómodo o aversivo, aumenta nuestra tasa de parpadeo, siendo una reacción fisiológica difícil de controlar. Sin embargo, cuando algo nos interesa o nos agrada, sucede lo contrario. En este primer vídeo, obtenido de https://www.youtube.com/watch?v=DVad882WQ40, se puede observar como se incrementa la frecuencia del parpadeo de Mª Dolores de Cospedal al ser incomodada por las observaciones de la periodista que la entrevista. 

Rascarse, sacudir la pelusa imaginaria (que para Poyatos sería un gesto exteriorizador), son gestos que aparecen en esas situaciones incómodas, en las cuales reprimimos lo que realmente haríamos: irnos, tapar la boca a alguien, agredir, golpear la mesa, etc. En el vídeo a continuación, cuya fuente es https://www.youtube.com/watch?v=1OmEMbeKAkc, observemos como, tanto Rivera como Sánchez, realizan ese comportamiento de desplazamiento al escuchar las palabras de Iglesias. No deja de ser curioso lo sincronizado del asunto.

Tragar saliva es otra reacción producto de una respuesta fisiológica ante la aparición de la tensión y del malestar. En el siguiente vídeo, extraído de https://www.youtube.com/watch?v=ZmTdShEzu7s&t=84s, se observan varios comportamientos de Arnaldo Otegi. Mientras escucha la argumentación y preguntas de una víctima de ETA, podemos observar como se rasca, como traga saliva notablemente (producto de la tensión) y como se reacomoda en el asiento (asociado a la incomodidad).

Muchas veces, partes del cuerpo realizan acciones representativas de lo que realmente deseamos hacer en ese momento. Obsérvese cuál es la reacción de Albert Rivera ante las palabras de Sánchez.

(Fragmento obtenido de http://www.atresplayer.com/television/noticias/debate-7d/2015/capitulo-8-debate-decisivo_2015120700347.html)

Para finalizar, resulta muy habitual ver a la gente jugueteando con objetos en una reunión, en una charla o en la sala de espera del dentista. Al final, todo es lo mismo: un comportamiento para adaptarnos a esa situación de tensión. En el siguiente fragmento, obtenido de https://www.youtube.com/watch?v=X2HMb0uaUDg, apreciemos la utilidad de una taza de café para escapar, disimular y esconderse de un estímulo molesto. 

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Francisco Campos Maya