sábado, 28 de julio de 2018

VALVERDE EN DESACUERDO

Ante las decisiones que toman los demás podemos mostrar acuerdo o desacuerdo. En este último caso, es posible que la situación nos dificulte expresarlo. Por ejemplo, cuando nuestro o nuestra superior nos comunica un cambio, sin habernos consultado, es posible que debamos reprimir que la idea nos parece algo descabellada. Aún así, es posible que nuestro cuerpo esté comunicando ese desacuerdo. 

De los movimientos corporales relacionados con el desacuerdo, teniendo en cuenta el contexto y la función de los mismos, podríamos encontrar:
·         La elevación de las cejas, mostrando incredulidad, escepticismo o descrédito sobre la idea que está encima de la mesa.
·         La elevación de una sola ceja, lo que Ekman denomina escepticismo sofisticado.
·         La formación de hoyuelos en las comisuras de los labios, unilateral o bilateral, asociada a la emoción de desdén, desprecio o arrogancia.
·         El alejamiento corporal, que supone un distanciamiento sobre lo que se está proponiendo.
·         La elevación del labio, unilateral o bilateral, asociado a la emoción de disgusto o asco.
·         El gesto de sacar la lengua, asociado al rechazo de esa interacción, bien por no ser agradable lo que se está escuchando, bien por necesitar concentración por las dificultades de la tarea, ya que se tienen que medir las palabras que se vayan a decir. Para revisar este gesto PINCHA AQUÍ.

En el siguiente análisis, tomando el fragmento obtenido en el enlace http://www.rtve.es/alacarta/videos/telediario/telediario-15-horas-28-07-18/4677323/, podemos observar dichos comportamientos en el lenguaje corporal de Ernesto Valverde, entrenador del FC Barcelona.

El fragmento corresponde al momento en el que se manifiesta sobre el nuevo fichaje, sobre el jugador Malcom.

El contenido verbal de su respuesta es el siguiente:

"Es un jugador joven, con proyección y que pensamos, o que piensa el club que nos puede … que nos puede ayudar."

De forma muy clara, en su respuesta deja claro que él no participó en la decisión final de fichar a Malcom. Pero si atendemos a su Comportamiento No Verbal, podemos inferir que Valverde es escéptico sobre ese fichaje, además de generarle malestar.

  •  Durante su respuesta se observan concretamente lo siguiente:
  •  Disgusto al tratar el tema.
  •  Escepticismo sobre la decisión del fichaje de Malcom.
  •  Sentimiento de que él no hubiese fichado a Malcom,
  •  Malestar y tensión por lo que está diciendo, pues puede generar polémica.
  •  Necesidad de regular las palabras que va a emplear, pues no son las que realmente   pronunciaría.


A continuación se muestran los comportamientos de Valverde sobre los que se han realizado esas inferencias.

EMOCIÓN DE DISGUSTO

En la siguiente imagen se observa la elevación del labio superior derecho, lo que se asocia con la emoción de disgusto.



Como es muy sutil, el siguiente GIF servirá para observar dicha microexpresión de Disgusto.



DESCRÉDITO, TENSIÓN Y ALEJAMIENTO
En la siguiente imagen se observa que, en el momento de su respuesta señalado en recuadro azul, Valverde se aleja de la posición inicial, lo que es la única forma posible de alejarse estando sentado, entendiendo que se aleja de “lo que piensa el club”. Además muestra tensión al frotarse la mano izquierda en la pierna del pantalón, como gesto adaptador y/o como forma de secarse la mano.
En su cara ya empieza a mostrar la elevación de ambas cejas, asociado al descrédito sobre lo que está comentando.


DESCRÉDITO, ARROGANCIA Y VIGILANCIA SOBRE LO QUE VA DECIR
En el momento señalado en el recuadro azul, Valverde muestra arrogancia o desprecio ante lo tratado, pues se observa la formación de hoyuelos en las comisuras labiales, además de mantener el descrédito comentado anteriormente. A esto hay que añadirle como realiza un esfuerzo para regular las palabras que debe emitir a continuación, expresado con el gesto de protrusión de la lengua.




En suma, tanto de forma verbal como no verbal, Valverde expresa estar disconforme con el fichaje de Malcom, o al menos por no haber sido parte de la decisión final.



BIBLIOGRAFÍA:
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Francisco Campos Maya



martes, 17 de julio de 2018

LA INCOMODIDAD DE PUTIN vs LA DOMINANCIA DE TRUMP.

El 16-07-2018 tuvo lugar un encuentro entre Donald Trump y Vladimir Putin, a propósito de Cumbre de Helsinki. 

En la primera aparición conjunta frente a las cámaras el Comportamiento No Verbal de cada uno de los mandatarios dejaron claras las diferencias de personalidad de cada uno de ellos. 

Para el análisis nos serviremos del vídeo https://www.youtube.com/watch?v=mJh8XfTtNpc, y atenderemos a la tensión que pudieron experimentar los dos presidentes, así como el dominio territorial que exhibieron.

En referencia a la tensión experimentada, Vladimir Putin fue el más tenso y su incomodidad la podemos detectar en la gran cantidad de gestos adaptadores o conductas de desplazamiento (para una revisión, pincha aquí) y en la respuesta fisiológica de tragar saliva. Es decir, da muestras claras de malestar e incomodidad (para diferentes indicadores de incomodidad, pincha aquí). Sin embargo, aunque sí aparecen adaptadores en Trump, éste se halla más cómodo en esa situación ante los medios.

Así, vemos a Putin golpeando el suelo repetidamente con la parte delantera de la planta del pie, tocándose los dedos, agarrándose al respaldo de la silla, rascándose el ojo, etc. 

Por el contrario, salvo el movimiento repetitivo de los dedos de Trump, éste mantiene mejor la compostura.


Al final del encuentro podemos observar a Putin rascándose la muñeca, por debajo del puño de la camisa. Si bien parece ser un autoadaptador, la forma de rascarse podrían interpretarse como un gesto oculto del dedo impúdico o peineta, pues la posición del dedo deja ciertas dudas en cuanto a su función como rascador. Sea como sea, lo que queda patente es la diferencia entre la tolerancia hacia esas situaciones entre los dos.



Otro aspecto es cuál de los dos muestra un comportamiento, aparentemente, más dominante
Si observamos el montaje al final del texto, se puede comprobar que tanto a la hora de tomar asiento, como a la hora del agradecimiento a la prensa, Donald Trump, tal y como pasó con el encuentro con Kim Jong Un, lleva la iniciativa. De esta forma aparece como el anfitrión, o lo que es lo mismo, como el dueño del lugar. Muy diferente al comportamiento de Putin, el cual no lleva la iniciativa en ningún momento. 

Por último, muy interesante el apretón de manos final. Éste se ha realizado sin moverse de los asientos, con los que la inclinación y la extensión del brazo nos dará información sobre la dominancia de cada uno de ellos. Sumemos también en qué mitad se halla cada una de las manos implicadas en el apretón. Como se observa, el ángulo de la extensión de Putin es mayor, lo que implica tener que desplazarse más hacia Trump. Además, la mano de Putin acaba en el territorio o mitad de Trump, dejando claro que ha sido él el que se ha acercado, que quien domina es Donald Trump. 



Al final, lo que queda claro es que Trump es más ducho en este tipo de situaciones, estando más a gusto ante las cámaras y con su estilo directivo a la hora de aparecer ante la prensa.

En el siguiente montaje se han ido señalando los indicadores mencionados en esta entrada, pudiendo apreciarlos en la dimensión temporal correspondiente.



BIBLIOGRAFÍA:


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Francisco Campos Maya